Vistas de página en total

jueves, 11 de abril de 2013

Bruselas, capital del crimen organizado

      El maestro José Luis Sampedro, fiel a su espíritu humanista y muy alejado del divismo y de la soberbia injustificada de muchos de sus compañeros de oficio - me refiero a los economistas-, nos enseñó algo sobre la Economía , y de paso , sobre otras muchas ciencias. Nos dijo que la Teoría Económica suele estar manipulada por infinidad de intereses. Nos dijo que la Teoría Económica dominante suele tener la tendencia a generar dogmas que los no iniciados pueden llegar a admitir como verdades  irrefutables. El viejo maestro sospechaba que ningún dogma es creíble. Fue especialmente insistente en que debíamos desarrollar recursos de defensa contra ellos.
            Yo también creo que detrás de cada dogma se esconde una mentira interesada.
            Nos dijo también que el tesoro verdadero es la vida.
          Una de esas mentiras interesadas que hoy nos cercan es que de la crisis saldremos por la vía de recortar la inversión del Estado y estableciendo medidas draconianas sobre los empleados, es decir, sobre quienes se sustentan mediante su trabajo. Este dogma circula por los discursos políticos, por los medios de comunicación más conservadores, por los debates donde profesionales - se repiten como seres clonados- de la desinformación, no sé si paniaguados, cínicos o sencillamente irreflexivos y carentes de la más mínima cultura histórica, defienden los recortes como la panacea de nuestros males. Pero abundan. Son legión. Una legión dañina porque sus mentiras han acabado adueñándose, también, de la conciencia ciudadana menos maliciosa, casi convencida definitivamente de que verdaderamente habíamos vivido por encima de nuestras posibilidades y de que las medidas del gobierno son las únicas posibles. 
            Pronto, si el proceso llega a conseguir sus objetivos de anulación de la capacidad crítica de la razón mayoritaria, quienes defienden - defendemos- la dignidad humana, quienes denunciamos este proceso de envilecimiento mediante la manipulación, seremos considerados el enemigo público, y es posible que la gente nos clasifique como  inadaptados, insatisfechos permanentes y peligrosos para la paz social. La protesta ciudadana ya se clasifica de brote terrorista , y esa opinión se extiende como aceite derramado en un mantel.
     Pero hay que seguir diciendo que es mentira, porque es una mentira indiscutible. Lo que se gesta en Europa es un proceso colonial. El Sur se ha convertido en un protectorado cuyos recursos se saquean de forma despiadada. Se mantienen las formas porque al Sur se le permite tener sus gobernantes, sus Parlamentos, sus Instituciones de justicia... Pero es pura apariencia. Son instituciones vicarias, sometidas, encargadas de aplicar sus medidas inhumanas en nombre de ese dogma criminal que nos ahoga la economía, los derechos, las libertades y hasta las ganas de vivir , en ocasiones.
    Rajoy acaba de recibir el último encargo de Bruselas, la capital del crimen organizado.
    Aún no has tocado en profundidad el sistema de pensiones le han dicho. Ahí queda margen todavía para aumentar los beneficios de los colonizadores.
     Abarata el despido, le ha conminado al presidente vicario. El improcedente, sobre todo. Barra libre a la empresa hasta que la situación de indefensión ante la miseria permita contratar por salarios de hambre. Ya lo hacen. En mi infancia conocí gañanes en las dehesas extremeñas que trabajaban por un plato de comida y un rincón en el cortijo para extender el jergón junto a la lumbre. Falta poco para volver a aquello.
     Hay margen - le exigen- para subir los impuestos indirectos. Poco importa que sea el recurso injusto de las dictaduras. 
     Una vez más Bruselas, esa banda de facinerosos que gobierna en realidad nuestras vidas, nos saquea a punta de amenaza de intervención y de sanciones económicas. Nos roba Bruselas a los trabajadores indefensos, huérfanos de un Estado protector. Nos roba ese ejército de bandidos trajeados y políglotas, pero carentes de conciencia. Son la manifestación de la voluntad de sus amos, del capitalismo descarnado a cuyo servicio han ascendido por la pirámide del crimen organizado contra los pueblos.
     La imposición sobre las transacciones financieras, la persecución del fraude fiscal, la eliminación de los paraísos fiscales son asuntos del mercado.Y en el mercado radica la verdadera libertad.
   ¡¡Hijosdeputa!!
   Nos están robando, sobre todo, el tesoro que mencionaba el maestro Sampedro, la vida digna que todos merecemos.
     

  

No hay comentarios:

Publicar un comentario